Por: Jacqueline Menchaca/blog/newsletter
Un 45 % de la población mundial, es decir, tres mil quinientos millones de personas, padecen enfermedades bucodentales.
Mientras la tecnología avanza de una manera estrepitosa, se realizan procedimientos casi de películas de ficción, se tienen datos exactos en 3D para tratamientos y diagnósticos dentales, etc., la mitad de las personas en el mundo no tienen una buena calidad oral.
Y de estas, 3 de cada 4 pertenecen a países de muy pocos ingresos o medianos.
Según el último Informe sobre la situación mundial bucodental, publicado por la Organización Mundial de la salud en noviembre de 2022 (que muestra perfiles de 194 países), en los últimos 30 años la cantidad de personas con problemas principales dentales como caries, gingivitis, periodontitis, ha aumentado en mil millones.
Dos mil quinientos millones de personas presentan caries no tratadas; mil millones de personas, por su parte, padecen periodontitis grave, mientras que cada año 380 000 casos de cáncer oral se diagnostican a nivel mundial.
Se habla, entonces, de cifras alarmantes, donde la población mundial más vulnerable a nivel económico debe lidiar, además, con estos padecimientos.
Motivos
Según el Informe, existen a nivel global algunas características que promueven esta escasa prevención y atención dental en la población:
- Costos altos que demasiadas familias no pueden pagar. En países como en México, acceder a tratamientos odontológicos de forma privada es algo difícil.
- El hecho de que los insumos y productos dentales sean especializados y de vanguardia, hace que los sistemas básicos de salud dental carezcan de ellos, dado, también, sus costos.
- Sistemas de vigilancia y seguimiento deficientes.
Qué hacer
Ya se había comentado, en algún blog anterior que, en el año 2022, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó una serie de estrategias para atacar este problema. El objetivo es que haya una cobertura universal de atención bucal para el año 2030. El plan de acción está en proceso y se espera con ello, ayudar a todos los países para realizar dichas acciones.
Este incluye un marco de monitorización para realizar un seguimiento del progreso, con metas claramente definidas y cuantificables que deberán alcanzarse para 2030.
Con las acciones a nivel global y aquellas que se hagan en México de manera gubernamental y privada, quienes sabemos la importancia de una buena salud dental no solo en el ámbito funcional y estético sino a nivel sistémico, esperamos una reducción en estas enfermedades que tanto afectan la calidad de vida, pero que son tan prevenibles…
¿Será posible que llegue ese día? Ustedes, odontólogos, también tienen en sus manos el poder de cambiar la situación actual. En su práctica diaria, al brindar una orientación al paciente sobre lo que representa tener caries, gingivitis, entre otros padecimientos, además de explicarle lo “barato” y beneficioso que es la higiene diaria, enseñarle a usar el hilo dental, alguna técnica de cepillado, etc. Todo eso forma parte del grano de arena que como profesionales hay que otorgar para lograr el cambio a nivel mundial.
Fuente. Boletín 18 de la OMS/18 de noviembre 2022