Por: Jacqueline Menchaca/blog/newsletter
La pandemia del año 2020 reforzó e incluso obligó a las instituciones académicas a realizar clases y capacitaciones online. No había de otra.
Afortunadamente y con el paso del tiempo, el COVID-19 fue controlándose y en la actualidad si bien aun hay casos, su presencia nada tiene que ver con los años pasados.
En todo el mundo, las clases virtuales ofrecieron muchas ventajas para quienes las tomaban en el centro del huracán pandémico, cuando la vida se paralizó en todos los ámbitos.
Una de las más importantes es y sigue siendo la posibilidad de continuar con la educación, pero sin la necesidad de desplazarse a algún lugar en específico; con la computadora o un celular, se puede tener acceso desde donde sea.
Como mencionamos en otros blogs respecto a este tema, la flexibilidad, el aprendizaje de herramientas virtuales, el dominio de plataformas, la comodidad de poder hacerlo desde casa, etc., son algunas de las ventajas.
Y es quizá por ello, que aun después de terminada la pandemia en muchos países e instituciones decidieron mantener la virtualidad en lo académico, conformando, así, programas educativos híbridos, donde las dos modalidades, presencial y virtual, tienen la misma utilización.
Si bien para muchos esto es ideal e incluso hay quienes quieren continuar con solo la virtualidad, acostumbrados ya a todo lo bueno que ofrece, en odontología hay sus detractores.
Muchas personalidades reconocidas del mundo odontológico afirman que la odontología debe ser presencial en un 90 o 95 %, sí o sí, y a nivel tanto de enseñanza como de exposiciones comerciales.
Otras, consideran que un mayor equilibrio tampoco estaría mal, solo es cuestión de que los ponentes adecuen la exposición a la modalidad, pues no es lo mismo.
A pesar de que médicos como Agustín Tiol Carrillo, especialista en odontología pediátrica, en un artículo propio, señala que no hay nada más antipedagógico que impartir clases sin considerar la participación de los alumnos, esto es muy cierto y puede resultar la constante en las clases virtuales si el profesor no se actualiza en su modo de impartir docencia, ahora virtual, con tecnologías y acciones adecuadas.
Hace unos días, por ejemplo, encontramos una nota donde los Consejos Generales de dentistas, farmacéuticos, médicos y veterinarios en España, confesaron sentirse preocupados por algunas iniciativas para el establecimiento de modalidad híbrida (semipresencial) en estudios de grados como las maestrías para las ciencias de la salud.**
En la nota, comentan que los representantes de estos Consejos recuerdan a la sociedad y comunidad académica que la formación de Grado, tiene niveles altísimos de excelencia y eso exige un mayor compromiso por la práctica en las disciplinas, misma que, forzosamente, debe realizarse en el aula, laboratorio o recinto para ello.
Ustedes, ¿qué piensan?
Hay quienes incluso consideran que los avances médicos de los últimos tiempos exigen ahora no solo la enseñanza tradicional, que para ellos ya resulta también insuficiente, si no se acompaña de la virtualidad.
Sin afán de editorializar esta nota, creemos que las plataformas y recursos digitales facilitan y optimizan las clases de forma virtual.
Sí, definitivamente los profesores o ponentes requieren adecuar la forma de exposición de sus conocimientos a la modalidad virtual para evitar que la atención se desvíe, o que tantos distractores del hogar hagan acto de presencia, o que sin algunas herramientas la clase resulte tediosa, etc.
Pero también es verdad, que la virtualidad académica puede resultar fascinante si se cuenta con los recursos adecuados, la capacitación de quien expone, y con las técnicas precisas para hacerlo. Algunas de ellas, como lo mencionó el doctor Agustín Tiol son los recursos como ciertos programas y plataformas que, a través del juego, concursos y sesiones interactivas, logran una mayor y mejor retroalimentación entre los alumnos y el maestro.
De la misma forma, los representantes de los Consejos Generales mencionados de España pueden tener razón, y para los grados académicos mayores sea indispensable únicamente la modalidad presencial.
De nuevo, encontrar el equilibrio es la clave y hacer un análisis de todos los recursos tecnológicos para su aplicación en los objetivos de altos grados académicos en el mundo de la salud.
Fuentes:
** https://dentistaentuciudad.com/noticias-dentales/sanitarios-alertan-por-formacion-semipresencial-en-grados-de-ciencias-de-la-salud/s distintos planes de estudio
Tiol A. Aplicación de las tecnologías en educación en odontología durante la pandemia por COVID-19. Rev. ADM. 2021;(78)3.
