Por: Jacqueline Menchaca/blog/newsletter
Un tema siempre actual es la educación continua. En cada profesión existen estudios posteriores a la licenciatura. Sin embargo, generaciones anteriores se conformaban con obtener esta; ahora, esa concepción, si bien es válida y plausible, “huele” a estancamiento.
¿La razón? Sencillamente que las necesidades de la actualidad, los avances tecnológicos exigen estar al día en los conocimientos científicos y descubrimientos de cada rama profesional.
Odontología Actual publicó un excelente artículo en la edición de este mes de septiembre, donde sus autores elaboraron un decálogo acerca de los puntos que deben considerar todos quienes deseen estudiar más allá de la licenciatura. La educación continua en esta profesión, comentan, es una necesidad, más que una opción.
Los posgrados, las maestrías, doctorados, además de congresos especializados, conferencias, etc., forman parte de dicha educación, la cual, según el decálogo mencionado debe contemplarse desde las siguientes perspectivas:
1 Reconocer la habilidad, destreza y actitud con que se cuenta.
2 Ampliar la visión de futuro y la aplicación de sus conocimientos.
3 Disposición para el trabajo difícil, lento e incómodo.
4 Contar con la información del costo total y las formas de pago.
5 Seleccionar el área de mayor interés.
6 Prestigio de la institución donde se imparte el estudio.
7 Contar con el apoyo familiar.
8 Trabajar, por lo menos, un año antes en el área de su interés.
9 Enfocarse para iniciarlo y terminarlo.
10 Estabilidad emocional del aspirante.
El decálogo se elaboró en base a las respuestas de una serie de entrevistas realizadas a profesionales de la Odontología que continuaron con su educación profesional después de obtener su título.
Dichas preguntas estuvieron enfocadas a conocer los motivos por los cuáles se decidieron a seguir profundizando en sus conocimientos académicos y científicos, así como solicitarles recomendaciones a los recién egresados de la carrera respecto a su continua actualización.
Y es que no son solo avances en investigaciones lo que prácticamente obliga al cirujano dentista a estar al día, sino aquellas creaciones tecnológicas, mismas que, si bien facilitan la práctica diaria en diagnósticos y tratamientos, sí requieren de competencias específicas para su manejo; los nuevos materiales de restauración, considerados mínimamente invasivos, por ejemplo, son ya esenciales y su aplicación necesita de toda una base informativa sólida y científica.
El acceso a las redes sociales, y con ello la posibilidad del paciente para conocer lo que hay, también es un motivo más de tener una educación continua. Los nuevos procedimientos, técnicas, aparatos, etc., están al alcance de quienes los busquen en internet y si el odontólogo los desconoce, podría ser motivo de considerarlo obsoleto, tal vez eso genere desconfianza y, en el peor de los casos, que se opte por otro profesional.
Ofrecer una atención integral a los pacientes, ingreso económico y una motivación meramente profesional son algunas de las respuestas que los entrevistados dieron ante la pregunta sobre la razón por la que estudió un posgrado. ¿Cuál fue en el caso de ustedes?
Fuente:
Álvarez AF, Benítez H, Carrillo P, Peña A. La educación continua necesaria. Odontología Actual. 2023 septiembre;20(245):42 p.
Con respecto a la educación continua, también hay que enfatizar la Certificación profesional, por un organismo avalado por la Dirección General de Profesiones SEP, con un evaluador externo, es decir con IDONEIDAD FEDERAL, que haga del odontólogo/estomatólogo un profesionista de la salud reconocido a través de un proceso transparente y de calidad.
Es muy cierto. Forma parte integral. Y es tan importante, que de hecho publicamos un blog exclusivamente de la Certificación Profesional. Gracias por el comentario.