De viaje por una sonrisa hermosa y funcional
Cuando escuchamos el término turismo dental pensamos que se trataba de una moda cuyo precursor era el turismo de vacunación contra COVID-19, pero no, esto tiene años, incluso miles de años si consideramos que el turismo médico (de donde deriva el dental) se practicaba ya en civilizaciones antiguas (4000 a.c) cuando las personas viajaban a templos de otras ciudades con el fin de darse baños medicinales en aguas termales. Los primeros “turistas médicos” datan de la Antigua Grecia, quienes se trasladaban desde el Mar Mediterráneo hasta Epiduro, donde se encontraba el Asclepion, hospital de Asclepio (dios griego de la curación), al cual acudían para sumergirse en aguas termales, tomar vino tinto y comer alimentos sanos.
En la actualidad cada vez son más las personas que practican el turismo dental, término que define a quienes viajan al extranjero para recibir atención odontológica a costos más económicos que en sus países, además de recrearse en los sitios a los que acuden. Según reportes, existe hasta un 70 u 80% de ahorro en el pago de dichos servicios odontológicos. En los países europeos de occidente, así como en Estados Unidos y Canadá, la forma de vida elevada tiene costos muy altos, y por lo tanto, los precios por atención dental son estratosféricos si no se cuenta con seguro; de ahí el turismo dental. Además del ahorro, y del viaje recreativo, los pacientes se encuentran con tecnología de vanguardia y odontólogos preparados de forma excelente a nivel profesional, algunos, incluso, hasta con posgrados o maestrías a nivel internacional, lo que ofrece una calidad igual, y en ocasiones, superior, que en los países de los que estos pacientes provienen.
Durante el X Congreso de Turismo Médico (2019), el secretario de Turismo, Miguel Torruco manifestó que nuestro país ocupa el primer lugar a nivel mundial en turismo dental (y el segundo en turismo médico), recibiendo entre 1.5 millones a 3 millones de personas anualmente. Tailandia, Hungría (Budapest), Colombia y Costa Rica también son destinos importantes en este sentido.
Algunas agencias de viajes, de hecho, promueven los famosos “viajes dentales”, y se les ofrece orientación sobre cómo y en dónde realizarlo. ¡Qué opción tan interesante y que gran oportunidad para México!
Como odontólogo, ¿quisieras implementar este tipo de servicio? Acompáñanos a revisar algunos tips que encontramos para ti*:
1.- Tener tu página web o manejar redes sociales, preferentemente en inglés y español. Recuerda que el 80% de los pacientes que practican turismo dental vienen de Estados Unidos y el inglés es el idioma universal.
2.- Ofrecer tus servicios especificando qué tipo de tratamientos realizas, si hay estudios previos, las formas de pago que utilizas y los costos tanto en pesos como en dólares. Con esto reafirmas la gran diferencia en el costo de tratamiento que realizarán si lo hacen en México, y contigo.
3.- Es importante mencionar datos relevantes de tu trayectoria académica y profesional, que generen mayor confianza, así como los protocolos de tratamiento que se hacen en tu clínica para que sepan de antemano si tendrán que regresar y en cuánto tiempo, o cuantas veces; y si, como algunos profesionales dentales, tienes alianzas con otros médicos residentes del país de donde proviene el paciente, para que en dado caso pueda continuar directamente allá. O si cuentas con algún seguro que les ofrezcas a ellos, en caso de alguna eventualidad, para resarcir algún tipo de daño que se le provoque a raíz del tratamiento o la intervención.
4.- Si sabemos que no solamente vienen a un tratamiento dental sino a pasear, y aunque no te dediques al turismo, es conveniente mencionarles aspectos propios del lugar que visitarán: lugares recomendados para recorrer, tipo de comida, zonas naturales que pueden visitar, tal vez precios de algunos hoteles cercanos a tu clínica, etc.
5.- Muchos odontólogos optan por trabajar en conjunto con agencias de viajes o empresas dedicadas al turismo para facilitar al visitante/paciente su estancia, y a ti, la realización de tus servicios.
6.- Lo más importante: la ética. Los pacientes no saben cuánto tarda una cicatrización o el tiempo requerido para su caso específico; o de lo que debe esperar para continuar hacia la siguiente fase de tratamiento, etc.; tú, como odontólogo, sí. No prometamos nada que pueda resultar perjudicial para quien ha venido a poner en nuestras manos su salud dental, y menos por adquirir algunos pesos más. Como lo comenta el doctor Néstor Vázquez médico odontólogo de Los Algodones, ciudad fronteriza mexicana mejor conocida como Molar City: “Hay que respetar la biología. Eso no puede negociarse solo porque el paciente estará dos días”. Los protocolos médicos tienen su porqué.
Fuentes:
*Erikaherrera.net
Milenio.com
Entrevista con el odontólogo Néstor Vázquez por Dr. Federico Baena
Luis Naranjo Duplant (video turismo dental)